Día 1: Toma de contacto
Llegada a Cartagena de Indias
Llegué sobre las 16:00h a Cartagena de Indias después de un vuelo desde Leticia con escala en Bogotá y comenzaba mi aventura de 4 días en Locombia. Para llegar desde Medellín o Bogotá a Cartagena hay vuelo directo pero tendrás que hacer escala si viajas desde Leticia. Había escuchado, leído y visto muchísimo sobre Cartagena pero todavía no me podía imaginar lo que me esperaba en el Caribe colombiano.
Al llegar al aeropuerto intento coger un Uber pero no es lo que mejor funciona en esta ciudad. Hay muchos pero supongo que tienen aun más solicitudes y tardan mucho en llegar. En dos ocasiones cancelé el viaje ya programado en Uber y cogí un taxi, que es lo que me pasó en el aeropuerto.
Alojamiento (Getsemaní)
Cuando me subo al coche, me pregunta el chófer cuál es mi destino y le digo que Getsemaní pero que ahora le digo el hostal, que lo estaba buscando. Después de hablar un rato con él y haberle explicado mis expectativas de alojamiento, me dice que él me puede llevar al mejor hostal de Cartagena en el barrio de Getsemaní lleno de gente joven y fiesta.
No llevaba reserva de alojamiento aunque sí sabía la zona donde me quería quedar. Por donde busques te van a recomendar Getsemaní o Ciudad Amurallada por ser más turística y segura que el resto de la ciudad. También había mirado algunos hostales posibles donde la fiesta estaba asegurada pero no llegué a reservar.
Sin pensármelo ni un momento y después de tanto haber leído, le digo que perfecto, que me lleve. Antes de reservar cualquier hostal miro el precio en las diferentes plataformas de reservas y voy al hostal a negociar el precio. Sé que puede parecer un poco tacaño, pero a veces los precios los exageran muchísimo por medio de estas aplicaciones y hay que sumarle la comisión que se lleva Booking, Agoda o quien sea. El caso es que voy y negocio.
Media Luna Hostel
Llego finalmente al Media Luna Hostel, en pleno barrio de Getsemaní pero en una calle donde el ruido de la gente y los bares todavía no es muy heavy. Me enseñan el hostal y se ve bastante bien. Tiene habitaciones compartidas de 6 personas, un patio central con piscina pequeña y música electrónica a tope (son las 16:00h) en una barra donde sirven todo tipo de bebidas. Por supuesto, me dejan el precio más barato de lo que pone en Booking y decido coger una noche. Cuando no hago reserva con antelación suelo coger una noche e ir ampliando día por día o irme si no estoy a gusto. Esto lo cuento en el post de cómo ahorrar viajando.
Estos hostales son los mejores para conocer gente si viajas solo o sola. En mi caso, el primer día conocí a un español que llevaba unos meses por Colombia, mi compañero de habitación irlandés y a un inglés que estaba muy loco. Este día no salí por venir bastante cansado de los días en el Amazonas pero lo que vino después fue apoteósico. También te dejo por aquí el post donde hablo sobre cómo conocer gente viajando solo por si te interesa.
Si tienes pensado pasar 4 días en Cartagena de Indias y no quieres vivir todos los días en Locombia, quizás puedas mirar la opción de coger dos días una habitación privada y otros dos un hostal con fiesta.
Personal del hostal
Mención especial merece el personal trabajador del hostal (Nico, Daniela, Esteban, Pupilo, Jesús…). Gente súper joven que siempre te intenta ayudar en lo que pueden, te llevan de fiesta y te ofrecen su casa literalmente. He conocido a dos personas en el hostal que habían estado en un pueblo cercano en casa de un trabajador. Son personas muy amables y agradables.
Día 2: Locombia
La fiesta en Media Luna y Cartagena
La música de la terraza empieza sobre las 15:00h de la tarde y la cortan sobre las 23:00h. Si quieres dormir la siesta, mejor que no te pille una habitación al lado de los altavoces porque hay que ir muy cansado para dormir a esas horas allí. Yo soy de sueño fácil así que no tengo problema pero la música está alta. Si en cambio quieres echar la tarde en la piscina y bebiendo copas o lo que te apetezca, vas a estar perfecto y podrás conocer mucha gente también.
Sobre las 20:00h, alguien del personal hace la ronda por las habitaciones y la terraza para animar a todos los huéspedes a unirse a una especie de pack de fiesta por Cartagena. No es el mismo pack todos los días pero todos los días tiene un precio irresistible. A las 23:00h como muy tarde sale el grupo del hostal a experimentar la vida nocturna cartagenera y cada uno vuelve cuando quiera o cuando pueda…
Yo me uní a uno que costaba 40.000 pesos (no llega a 10€). Consistía en un tour de 2 horas en un barco con luces, altavoces a tope y barra libre de cerveza y una especie de ron un poco rara. Después del barco, había también entrada gratis a una de las discotecas donde mejor me lo he pasado en mucho tiempo. No solo por la gente que me acompañaba sino por la calidad del DJ que pinchaba en este garito (soy músico, créeme que es muy bueno).
La discoteca se llama Eivissa (Ibiza) y está justo al lado de la Torre del Reloj, la entrada principal a la Ciudad Amurallada. Tiene dos plantas. En la primera tienes reggaetón y música más comercial pero en general muchísimo perreo (de verdad, mucho). La planta de arriba está al aire libre, es una terraza. Aquí es donde el DJ se lo goza de una manera brutal pero no está todos los días, solo los fines de semana.
Además del personal del hostal que me acompañaba y con quien ya había hecho cierta amistad, venía también una pareja colombiana que estaba en mi habitación y con quien también había hablado ya. Realmente fueron ellos los que me convencieron a ir. No quería ir porque al día siguiente tenía planeada la excursión a Islas del Rosario. Al final fui a la fiesta y por supuesto no fui a las islas. Más abajo explico cómo Cartagena me robó un día de mi calendario.
Una vez en el barco nos presentamos al resto de compañeros (todos del hostal) y aunque al principio todo estaba un poco parado, sirvió para entonarnos entre la barra libre y el meneo del mar. Poco a poco nos fuimos animando y cuando terminó el viaje en barco, nos fuimos a la discoteca. En la discoteca antes mencionada nos pegamos un auténtico fiestón. Compramos directamente una botella para unos cuantos y a beber ron con una mezcla rara de zumo de limón que pusieron en una jarra.
Como explico en otros posts, entraré en detalle explícito en el e-book que publicaré sobre Locombia.
Día 3: El día que Cartagena me robó
Islas del Rosario
¿Cómo NO llegar?
Este día me acosté a las 6:30h y la excursión a Islas del Rosario salía a las 8:30h. Aun así, cuando me desperté a las 10:00h intenté ir al menos a Barú pero no fui capaz.
Si has dormido 3 horas y encima te levantas con resaca (guayabo), no es la mejor opción intentarlo. Fui a la aventura, preguntando dónde se coge el autobús hacia Pasacaballos. Lo encontré, me monté (serían como las 10:30h) y empecé a pasarlo muy mal. El autobús no tenía aire acondicionado, había muy poca gente dentro y ninguno de ellos turistas. Para más inri tardas 2 horas y pico en llegar a Isla Barú (llegaba sobre las 12:30h y a las 16:00 o 17:00h es hora de irse). Aquí fue cuando mi mente me invitó a bajarme del bus y dejar la excursión para el siguiente día. Qué elección más buena por cierto.
A las 10:00h ya no merece la pena ir a Islas del Rosario. Como mucho ir a Isla Barú porque va a ser muy difícil encontrar barco y las vueltas a Cartagena suelen ser pronto (17:00h aprox.).
Volví al hostal y pasé parte del día durmiendo y conociendo gente en la barra de la terraza y en la piscina. Al principio estaba rayado por estar perdiendo un día pero la aventura es lo que tiene, no se puede tener todo.
Al final aproveché el día yendo a la playa de Bocagrande y visitando varios lugares. Si tienes un día con guayabo o simplemente te apetece pasar un día tranquilo por Cartagena:
¿Qué ver en Cartagena de Indias en 1 día?
- Playa de Bocagrande: no es ni de lejos la más espectacular de Cartagena pero es tranquila y no está masificada. Bocagrande es la zona rica de Cartagena, con enormes edificios que recuerdan a Miami.
- Free tour por la Ciudad Amurallada: aunque la ciudad es bonita por sí misma, con un guía puedes caminar conociendo la historia. También es tu historia.
- Torre del Reloj: es el centro neurálgico de la ciudad desde donde puedes contratar guías para cualquier actividad, comprar comida callejera y vivir la vida cartagenera.
- Castillo San Felipe: se encuentra en la Colina de San Lázaro. Merece la pena conocer la historia que se remonta a los españoles en el siglo XVI.
- Santuario de San Pedro Claver: un santuario que desde lejos es lo que nos recuerda (al menos a mí) a Cádiz. San Pedro Claver fue conocido como el «esclavo de los esclavos».
Día 4: Caribe colombiano
Islas del Rosario
Llegar por libre
No pueden faltar las playas y el ambiente caribeño en un tu viaje de 4 días por Cartagena de Indias. Si planeas ir sin agencia tendrás que coger un bus desde Cartagena a Pasacaballos (importante que el bus tenga aire acondicionado). En Pasacaballos hay taxi motos que te llevan hasta Isla Barú. En esta isla tienes Playa Blanca, una playa paradisiaca del caribe colombiano. Desde aquí también puedes contratar barcas para que te lleven a otras islas. En total, como he dicho antes, unas 2 horas.
Este plan está muy bien si no tienes prisa y vas a dormir en alguna isla.
Con tour organizado
Esta opción es la que yo escogí. Los «pasadías» son excursiones que literalmente se refieren a «pasar el día». Los horarios aproximados de estas excursiones suele ser de 8:00h a 18:00h.
Hay muchas empresas que organizan los tours pero todas ofrecen prácticamente las mismas excursiones. Éstas son tour de Isla Barú y Playa Blanca, islas privadas, tour de las 5 islas, tour de las 28 islas, Playa Tranquila (que no tiene mucho de tranquilo) o Isla Cholón. Hay muchas más y casi todas incluyen alguna actividad acuática y el almuerzo.
Puedes contratarlas el día de antes en alguna agencia o personas que hay alrededor del muelle de Los Pegasos o puedes ir directamente al muelle a las 7:00h – 7:30h para contratarlo directamente allí.
El que escogí fue el:
Tour de las 5 islas
Unos 60€ (con almuerzo) que en mi caso fueron:
- Bocachica (aunque no hicimos parada en tierra, nos dieron reseñas históricas el lugar y una vista panorámica por el resto de las islas de alrededor).
- Isla Grande (es una isla privada donde incluía un cóctel).
- Isla Cocotera (aquí nos dieron material de snorkel para contemplar los corales y los peces).
- Isla Cholón (esto es lo máximo, es una isla donde sólo hay fiesta y mesas de madera con sombrilla en mitad del mar. Sí, hay bastante gente pero no vas a vivir nada parecido a esto).
- Isla Barú (fuimos exactamente a Playa Grande y nos dieron de comer un menú muy bueno en un restaurante).
En mi caso, el trayecto fue desde Cartagena en lancha deportiva con música y tu propia bebida aunque puedes coger la opción que explico en «Llegar por libre» también con agencia y todo contratado. La agencia con la que contraté es una empresa local pero te puedo pasar el contacto si te interesa.
Si viajas sola o solo, lo mejor es contratar un pasadía porque pasarás todo el día con el mismo grupo y ahí habrá gente con la que congenies y puedas pasar un día de fiesta en confianza como si estuvieras con tus amigos de toda la vida. Aquí puedes contratar uno similar que incluye snórkel y plancton con la compañía GetYourGuide. Con Civitatis también tienes opciones como esta con buenas opiniones.
Yo de hecho, por suerte (porque en este viaje he tenido mucha), di con un grupo de chicas y un chico americanos de Los Ángeles con los que volví a quedar por la noche para salir. Y digo por suerte porque al principio me subieron a un barco donde la gente estaba más «parailla» y me bajaron (porque sobraba una persona) para subirme a otro barco donde conocí a esta gente y nos pegamos todo el día bebiendo y bailando en el barco y en cada isla en la que parábamos.
Conclusiones
Rumba en Cartagena de Indias
Cartagena es la ciudad más turística de Colombia y esto se puede apreciar nada más poner un pie en el centro histórico. Por el día decenas de vendedores ambulantes abarrotan la plaza de la Torre del Reloj para ofrecer tours guiados, souvenirs, comida, bebida y todo lo que pueden ofrecerte en Colombia.
El ambiente nocturno es espectacular aunque el escenario cambia bastante como en toda Colombia. La movida se concentra en Getsemaní y la Ciudad Amurallada así que lo mejor es quedarse por esta zona. Es parecido a Medellín en cuanto a la multitud de discotecas, de gente, chivas rumberas y ambiente en general pero, personalmente, me quedo con Medellín y ahora explico por qué.
Vida callejera (Locombia)
El cartagenero es muy parecido bajo mi punto de vista al andaluz, al costeño (ellos mismos presumen de ser costeños). Por mi orgullosa condición de andaluz, me sentí bastante identificado. Son personas súper extrovertidas, muy relajadas y a los que les encanta el cachondeo, la playa, la cerveza y el sol. También es normal siendo la ciudad que es y estando en el Caribe.
Todo esto no quita que me haya sentido bastante agobiado aquí. Desde el primer momento que puse un pie en la zona céntrica para buscar algo de comer, era un no parar de gente intentando venderme comida, bebida, alojamiento o cualquier cosa que puedas imaginarte estando en Colombia.
Ojo que no me quejo, no es la ciudad donde más agobiado en este aspecto me he sentido (si has estado en Marruecos sabes de sobre a lo que me refiero). Bueno, sí, me quejo un poco. Porque llega un momento que ya cansa. Recuerdo a un muchacho caminando conmigo por el centro durante 15/20 minutos ofreciéndome de todo. Cuando viajas solo esto se acentúa aun más.
La realidad
Esto no me había pasado tan pronunciado ni en Bogotá ni en Medellín y mira que son ciudades gigantes y con mucha gente pero esto se debe a que Cartagena de Indias es la ciudad más turística de Colombia como he dicho antes. Los países menos desarrollados viven al día, la gente de la calle se levanta para buscarse otro día más el pan. Cartagena está llena de turistas y es normal que todo el que no tiene otra cosa, se eche a la calle a ganarse la vida.
Aun así, me gustan estos lugares donde emana vida en cada rincón. En Marruecos he estado 4 veces y aunque a veces me siento agobiado, este tipo de destinos tiene un encanto que no se asemeja al concepto cultural que tenemos tan arraigado en nuestro país.
Precios
Los precios que te vas a encontrar en Cartagena son una pasada. Te puedes encontrar fácilmente que te quieran cobrar hasta 5 veces lo que cuesta un producto. Por ejemplo, una lata de cerveza en la calle cuesta 2.500-3.000 pesos, a mí me han llegado a pedir 12.000 pesos.
Esto tiene su lógica y es que, si bien hay turismo europeo y latinoamericano, la mayor parte que visita Cartagena y Colombia (con mucha diferencia) viene de EE.UU. Los «gringos» (como ellos les llaman) tienen pasta y los colombianos lo saben. Por eso por norma general van a exagerar los precios muchísimo.
Lo que yo hago cuando me gusta algo de una tienda o un puesto es: primero hablar un poco con el tendero y caerle bien (fundamental), después pregunto cuánto cuesta añadiendo algo gracioso como «¡Precio de hermano eh, que yo no soy gringo!». El precio que me dice normalmente tengo que volver a regatearlo y finalmente, si me gusta y creo que aunque estoy pagando de más, es un precio razonable por el producto, lo compro y me voy dando las gracias.
Esto en Colombia y en cualquier parte del planeta.
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